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El consejo del hijo es una excelente reflexión sobre como hay consejos que destruyen la vida de las personas, pensando estas que son buenos consejos por la persona que nos lo da, cuando en realidad son consejos que en lugar de construir, destruyen, por todo lo que luchaste en la vida.
Este cuento clásico trata de un hombre que desde joven trabajo arduamente vendiendo perros calientes, comenzó como todas las personas con un pequeño puesto de perros calientes a la orilla de un camino. Por amor a su trabajo se esmeraba haciendo los mejores perros calientes comprando las mejores salchichas y los mejores panes. De esta forma la clientela fue creciendo y el negocio cada día estaba mejor, aumentaban las ventas y había clientes que llegaban de diferentes partes para comer aquellos deliciosos hot dog.
El hombre vivía feliz con su negocio, no leía la prensa, ni escuchaba la radio, ni veía la televisión, estaba dedicado por completo a su floreciente negocio, por lo que no veía ni escuchaba nada más.
El negocio iba también que el padre envío a su hijo a estudiar a la mejor y más costosa universidad de economía del país. Años después su hijo se graduó con las mejores notas y recibió su titulo de economista con honores.
Su padre estaba muy orgulloso de él. Era una inmensa alegría, logró pagarle toda la carrera a su hijo y esta le respondió graduándose como el mejor alumno de la promoción. Cada día que llegaba a su puesto de perritos calientes se sentía también orgulloso de si mismo, con aquel humilde puesto había sacado adelante a su familia sin que nunca les faltara nada.
Un día llegó su hijo y le pidió al padre tener una sería conversación con él. Se sentaron en el salón de su casa y el hijo miro a su padre fijamente.
-Padre usted no sabe la grave situación que vive el país -dijo el hijo- usted no lee la prensa, ni escucha las noticias de la radio, ni ve la televisión, vive aislado en su mundo del carrito ese de perritos calientes por eso no sabe lo que esta pasando.
El padre se quedó pensativo mirando a su hijo sin pronunciar palabra.
-La economía de este país esta por el piso -continuo el hijo- el que no se mueva se hunde, va a la quiebra con toda seguridad.
El padre se puso muy nervioso y le dio las gracias a su hijo por el consejo que le daba. Enseguida se fue y compró las salchichas más baratas y los panes más baratos que consiguió, lo mismo hizo con las salsas y demás ingredientes.
Al poco tiempo la fiel clientela que tenía se fue diezmando hasta desaparecer, viendo que ya no tenía clientes y el negocio no daba, decidió cerrar el puesto de perritos calientes que tantos años lo acompañó y le dio tanto bienestar.
Lo primero que hizo después de cerrar su negocio, fue ir a visitar a sus amigos y contarles como su hijo lo había ayudado, lo inteligente y preparado que era su hijo que le advirtió de la crisis económica que se avecinaba y lo orgullosos que se sentía de él por haberle advertido a tiempo y de esta forma pudo evitar quedarse endeudado al declararse en quiebra rápido, porque ya sabía gracias al consejo de su hijo que la quiebra iba a llegar inevitablemente por la grabe crisis económica que atravesaba el país.
Te recomiendo ver el siguiente video sobre el consejo del hijo en mi canal de YouTube
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